Son tres modalidades: la primera de Bs 70.000 para la refacción o ampliación, de Bs 150 mil para construir en terreno propio y la de Bs 230 mil para la compra.
Con el objetivo de que más gente acceda a un plan de vivienda en el país, el Gobierno lanzó ayer oficialmente el Fondo de Garantía para el Crédito de Vivienda Social y Solidaria (Fogaviss) que, a diferencia de los anteriores, el crédito de vivienda ya sea para refacción, construcción y compra será más accesible en los requisitos e incluso en los ingresos que tienen las personas.
“El Fogaviss es una oportunidad histórica para una generación que gana menos de 6.300 bolivianos y que por ello jamás pudo calificar a un crédito de vivienda (…), porque este fondo de garantía le servirá de respaldo para acceder a tres tipos de créditos (..). Ya no necesitarás presentar tu boleta de pago, porque las financieras especializadas para esto conocen tus ganancias y otros detalles más”, afirmó el ministro de Obras Públicas Iván Arias.
De acuerdo con el ministerio, se tienen tres modalidades de créditos con una tasa anual del 5,5%. La primera es de 70.000 bolivianos destinados para la refacción de la casa o ampliación; la de 150 mil bolivianos para construir una vivienda en terreno propio; y la de 230 mil para la compra de un bien inmueble.
Entretanto, el viceministro de Vivienda Vladimir Ameller resaltó que el beneficio es para las personas que ganan menos, quienes hasta ahora no podían acceder a préstamos y que el fondo tiene el objetivo de mejorar la economía, fomentar el sector de la construcción y fundamentalmente cubrir el déficit y la calidad de vivienda en Bolivia.
“El Fogaviss es una oportunidad histórica para que la gente que gana entre 2.100 y 6.300 bolivianos tenga la oportunidad, porque este fondo de garantía le servirá de respaldo para acceder primero a dos tipos de créditos, uno hasta 150 mil bolivianos y otro de hasta 70.000 bolivianos”, explicó Ameller.
Indicó que, por ejemplo, en el primer caso, una persona podrá acceder al crédito para construir su vivienda en un terreno que ya posee, pidiendo prestado hasta 150 mil bolivianos, con una contraparte del 15%.
Mientras que el crédito destinado a la compra de un inmueble será canalizado mediante la banca. Por ejemplo, se podrá acceder a una vivienda de 100 metros con 150 mil bolivianos o se podrá comprar una casa con un préstamo de hasta 230 mil bolivianos de los inmuebles de la Agencia Estatal de Vivienda.
Según cifras oficiales, alrededor de 880 mil ciudadanos bolivianos tienen déficit habitacional; si bien la mayoría cuenta con un techo, está en condiciones precarias.
Las diferencias
Los créditos para vivienda para los dos primeros casos ya no serán canalizados mediante las financieras múltiples, sino que ahora el Banco de Desarrollo Productivo (BDP) -para otorgar este fondo de garantía que cubre hasta un 85% de cobertura- trabajará con la banca de pequeña y mediana empresa (PyMes), cooperativas de ahorro y crédito, además de entidades financieras de apoyo a la vivienda.
“El BDP administrará el Fogaviss con una primera inyección presupuestaria de 500 millones de bolivianos. Dará las condiciones a las entidades financieras y empresas del sector inmobiliario para que impulsen al mercado de vivienda social y cualquier boliviano de ingresos bajos pueda acceder a un crédito y comprar una casa propia entre 20 a 30 años plazo”, señaló el presidente de directorio del BDP Jorge Alberto Ortiz.
Para ello, inicialmente se firmó un contrato de transferencias de recursos con las instituciones financieras de desarrollo: Pro Mujer e Idepro, para que de inmediato puedan colocar créditos de vivienda social para los bolivianos.
Inmuebles construidos no se venden por falta de títulos
Desde que está vigente la Agencia Estatal de Vivienda, alrededor de nueve años, se impulsó la construcción de más de 4.000 viviendas unifamiliares de las que sólo logró vender un total de 487, una cantidad mínima principalmente por la falta de títulos de propiedad y saneamiento, según el Ministerio de Obras Públicas.
“Hoy hay construcciones que están en El Alto, en la zona Sur, en Cochabamba o en Santa Cruz, pero que no se pueden vender. En todo lado hay montón de soluciones habitacionales, más de 3.000 viviendas que no se pueden vender ¿por qué?, porque se han hecho en lugares alejados, no tienen derecho propietario y no están saneados”, cuestionó el ministro de Obras Públicas Iván Arias.
Otro ejemplo que citó es el bloque multifamiliar de la Villa Bolivariana, en Cochabamba, donde sólo estaban permitidos seis niveles, pero se construyeron 12 pisos y ahora sanear esos seis pisos tiene un costo elevado. “Por eso están ahí esos bloques en Villa Bolivariana. Para que la Alcaldía dé título, hay que sanearlo y pagar mucho dinero”, cuestionó.
El viceministro de Vivienda Vladimir Ameller dijo que uno de los errores que cometió el Estado es convertirse en constructor, planificador y vendedor. Eso hizo que por ejemplo destine más de 1.209 millones de bolivianos en viviendas unifamiliares, de las cuales sólo recuperó el 10%, es decir que de 4.027 viviendas, vendió un total de 487.
FUENTE: PÁGINA SIETE / LA PAZ