Se abre el comercio en municipios fronterizos con Brasil, así como los vuelos internacionales y viajes interdepartamentales en el eje central.
Varios son los sectores que expusieron a las autoridades nacionales, departamentales y municipales, sus razones de volver a operar para reactivar sus economías y dinamizar el mercado nacional, como los productivos, del transporte terrestre y aéreo, los gastronómicos, el turismo y la hotelería, así como las cámaras empresariales, solicitaron políticas impositivas, económicas y sociales para enfrentar la actual coyuntura.
El Gobierno abrió los aeropuertos de El Alto, Cochabamba y Santa Cruz para vuelos internacionales, también los viajes interdepartamentales entre Santa Cruz, Cochabamba y La Paz, de esta manera los operadores aéreos y terrestres empiezan a dinamizar sus operaciones.
Entretanto, la Cámara Boliviana de la Construcción (CABOCO) exige el pago de la deuda que tiene el sector público con el sector, suma que bordea los 2.500 millones de bolivianos, cuyos recursos brindarán liquidez a las empresas para cumplir con sus obligaciones crediticias, impositivas y sociales.
De no acceder a su solicitud anticipan una caída y extinción acelerada del empresariado constructor privado nacional, a causa de la desatención de las autoridades nacionales.
Mientras tanto, las Cámaras de Comercio e Industria solicitaron a las autoridades nacionales flexibilización laboral y pausa impositiva, para lidiar con los efectos de la pandemia.
En su momento, el presidente de la Cámara Nacional de Comercio (CNC), Rolando Kempff, estimó que las pérdidas representarían alrededor de 2% del Producto Interno Bruto (PIB), y para finales de gestión llegaría a 2,5%, alrededor de 3.000 millones de dólares.
Por su parte, los empresarios señalaron que las pérdidas provocadas por los bloqueos solamente, alcanzaron a unos 200 millones de dólares, y el Gobierno informó que los daños por los 12 días de paralización de la circulación vehicular, la suma alcanzó a 700 millones de bolivianos.
El turismo se paralizó completamente así como los hoteles, la gastronomía busca levantar vuelo pero dependerá de las autoridades municipales para la apertura de los locales al público.
Para ello los gastronómicos presentaron un plan de bioseguridad para la apertura de los locales al público, a las autoridades municipales y esperan una respuesta a su petición para evitar el cierre y pérdidas de más empleos en el sector.
Por otra parte, el informe Doing Bussines 2020 coloca a Bolivia en el puesto 150 de 190 economías, cuya ubicación muestra cuesta arriba para hacer negocios en el país a comparación de sus vecinos, que están mejor ubicados.
En ese contexto, Bolivia abrió actividad comercial en municipios fronterizos con Brasil, en cumplimiento al Decreto Supremo Nº 4314 de posconfinamiento, en vigencia desde el 1 de septiembre.
Se autorizó el ingreso y transitabilidad de bolivianos y extranjeros, así como la actividad comercial en los municipios de Cobija, Guayaramerín, San Matías y Puerto Suárez.
La medida fue anunciada este martes, a través de un comunicado conjunto de los ministerios de Relaciones Exteriores, de Gobierno y de Defensa.
“Municipios adicionales serán agregados a esta lista una vez que los Estados o municipios aledaños garanticen el tratamiento recíproco a los ciudadanos bolivianos, previa coordinación a través de la Cancillería”, señala un comunicado público emitido este martes.
FUENTE: EL DIARIO