La entidad dio la instrucción el martes a las entidades financieras para su aplicación y el beneficio abarca a todos los prestatarios.
El director general ejecutivo de la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (Asfi), Reynaldo Yujra, remarcó este miércoles que el periodo de gracia para el refinanciamiento y la reprogramación de créditos “es una medida que favorece a los prestatarios y también precautela la salud financiera del país”.
La entidad dio la instrucción el martes a las entidades financieras para su aplicación y el beneficio abarca a todos los prestatarios. Aparte, el periodo de gracia es de cuatro meses mínimo, pudiendo extenderse por un acuerdo entre partes.
«El presidente Luis Arce ha sido enfático en generar todos los espacios de diálogo para promover mecanismos de ayuda para la población, pero también en la administración, ser conscientes de que tenemos la responsabilidad de administrar la economía del país», dijo Yujra a Bolivia TV.
La decisión fue asumida tras una evaluación del Ministerio de Economía y Finanzas Públicas y el Ministerio de Desarrollo Productivo, ante la demanda de un abanico de sectores económicos, entre los cuales se encuentran los choferes y los microempresarios.
«Durante cuatro meses los prestatarios dejarán de pagar la cuota que corresponde al capital y en cuatro meses pueden dialogar entre prestatario y entidad financiera para que exista un plazo mayor (de pago de la deuda), dependiendo de las condiciones del prestatario», sostuvo Yujra.
«La norma salió ayer (martes) y esperamos que las entidades financieras puedan ser sensibles con la población y proactivas para que apliquen estos procesos de diálogo para concordar entre prestatarios y entidad financiera cuáles son las mejores condiciones para reprogramar o refinanciar los créditos», dijo la autoridad, según la agencia ABI.
Indicó que se descartó otro diferimiento de créditos porque puede dificultar el buen flujo de ahorros de la población en los bancos. «Hay que recordar, el sistema financiero no solo ve la forma de canalizar créditos, sino también administra los recursos económicos de la población. El crédito no es una donación ni un bono, hay la obligación del pago».
Fuente: La Razón.
