El miércoles, la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (CEPB) indicó que la grave situación del empleo y de la mayoría de las empresas “hace imposible” sostener un aumento superior a la inflación de 2017 y al índice de la expansión económica.
El Gobierno y la Central Obrera Boliviana (COB) empiezan hoy a negociar el alza salarial de este año. El tema será discutido en una mesa económica que se instalará junto a otras tres: la productiva, la social y la de normas.
El ministro de Trabajo, Héctor Hinojosa, informó ayer que el Ejecutivo ya tiene “una política definida” sobre los incrementos al haber básico y el salario mínimo, aunque no detalló los porcentajes de su propuesta, y ratificó que ambos estarán en función de la inflación acumulada de 2017, que llegó a 2,71%, y al crecimiento de la economía, que se situó en 4,21%.
La autoridad dijo que se tomará en cuenta el planteamiento de la patronal privada así como la propuesta de la COB, que pide una mejora del 10% al básico y del 15% al mínimo, lo que en criterio del ente laboral busca reponer la pérdida del poder adquisitivo.
Hinojosa señaló que toda determinación deberá garantizar la estabilidad económica del país y las inversiones para que la economía continúe expandiéndose. El ministro adelantó que en la negociación se fijarán “topes de trabajo” y se dialogará de forma ardua hasta obtener resultados.
La autoridad apuntó a que los ministros asignados y los delegados del ente sindical para cada una de las cuatro mesas se darán cita este lunes, a las 10.00, en instalaciones del Ministerio de Educación. Resaltó que las demandas contenidas en el pliego petitorio de la COB, que suman 80, se debatirán de manera simultánea.
Para Hinojosa el alza salarial debe considerar la realidad económica pero no solo enfocarse en el momento actual, pues la política gubernamental ha sido conceder un incremento “real” y no nominal, por ello debe estar por encima del índice inflacionario.
FUENTE: LA RAZÓN / ALINE QUISPE / LA PAZ